Nuestros alumnos vivieron una actividad multisensorial única: se enfrentaron al reto de limpiar una playa contaminada, recolectando residuos y clasificándolos correctamente en sus respectivos contenedores.
Esta jornada no solo fue una acción concreta por el planeta, sino también una oportunidad para reflexionar, sentir y actuar con conciencia ambiental.
Aprendimos que cada paso cuenta.
Que nuestras manos pueden transformar.
Y que cuidar el medio ambiente comienza por nuestras propias acciones.
Juntos construimos un futuro más limpio y sostenible.



